Casi en el ecuador

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Estaba yo por aquí, preguntándome cosas, como siempre (quién me mandará a veces…). ¿Habrá alguien que lea esto?

¿Alguien -aparte de mí- sigue entrando por aquí de vez en cuando para ver si hay noticias?

…

– ¡Ecoo, eeecoooo!
– … … ooooo! … … ooo! … o!

– ¡Eeeeeecoooooooo!
– … … … eeooooo! … … oooo! … oo!

…

Estamos casi casi en ese punto entre los dos polos del año, y esto aún suena a hueco… Un mes más cerca de la nochevieja pasada, y ya no se oyen voces. Un mes más lejos de la próxima, y aún no sabemos dónde sucederá el milagro. Entre medias, han ido sucediendo pequeños encuentros por grupos, como las quedadas madrileñas y las ilicitanas, y también algún encuentro fortuito: como el de las sevillanas y una parte de la sección Madrid, allá por tierras gaditanas. ¡Jaja! Estuvo bien comprobar una vez más que el mundo es más pequeño de lo que nos parece, y que estamos más cerca unos de otros de lo que a menudo sentimos. Pero eso ya fue en Semana Santa, y las quedadas aún antes…

¿Y ahora?

¿Qué es de vuestras vidas y vuestros planes?

Y lo que es más importante —esto va dirigido directamente al esternón de The Organizers— ¿qué es de nuestros planes? Yo ya me estoy poniendo nostálgica, como podéis ver, y necesito un terroncito de azúcar para llegar con fuerzas al Ecuador. Puede ser en forma de anticipo de destino, o de algún detalle interesante de la próxima Nochevieja…

O también podría ser, mejor, en forma de quedada veraniega multitudinaria.

Multitudinaria y, si puede ser, con mar…

… ¿no?

… … ooo? … oo? ... o?